Y para el final, la etapa de montaña. Tras los dos..."agitados" fines de semana anteriores, decidimos darnos un descanso (por que? por que nosotros lo bebemos!) y acudir a la sobria y silenciosa calma de los tres dias de las fiestas de Laxe. ...se puede decir que mucho no descansamos...que nos tomamos un par...psché, pa que engañarnos, nos pillamos tres cebollones como tres soles. Vamos que al cuarto dia estabamos mas asados que el churrasco que nos metimos entre pecho y espalda. Mucha gente, pocas personas, un puñado de heridos y un buen montón de anécdotas que se reflejan una vez mas en este impresionante documento gráfico de la agencia ELE :
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Y hasta aqui puedo leer. Está siendo un verano intenso de orquestas, cachis...y lo que te queda, mujer!!...eh!!...malo será!!